sábado, 7 de julio de 2007

El extraño caso de José

-Qué ha pasado aquí
-comandante Ortega, parece que tenemos un suicidio
-Otro, van cuatro en esta semana, investiguen que ya quiero aprender al responsable ¡Jaja!
-Señor parece que dejo un vídeo
-¿Un vídeo?
-tómalo como evidencia lo veremos en la estación
-claro señor
-bien señor forense dígame todo pero no ahora, presente un buen informe por favor
-si señor lo tendrá listo a penas lo termine en su escritorio
-
¡bien así me gusta!
-señor
-Qué pasa
-aquí hay algo raro
-Qué es Robert
-parece un diario pero esta lleno de sangre
-tómalo como evidencia, y a todo esto donde están los padres
-no han regresado de su viaje señor pero ya fueron informados no tardan en presentarse
-que mal este joven a penas tenia 20 años
-fue rápido y no sufrió demasiado, las lesiones que presenta debió hacerlas otra persona, como hubiese recibido una paliza antes del suicidio
-
pues eso no me gusta nada, habrá que investigar bien, una vez que lleguen los padres despachen los conmigo
-esta bien mi comandante
-tu no Robert, ven analicemos la evidencia y presentemos el informe


Es difícil o mejor dicho ver las estadísticas de los suicidios en el mundo, la mayoría de los casos son adolescentes o adultos jóvenes el promedio de edad es de 21 y las cifras de suicidios va en aumento siendo la mayoría mujeres, en muchos casos los jóvenes cometieron algún delito antes y en otros tantos simplemente están tan desesperados que no pueden ver mas allá de la muerte.

Ese día en particular el joven que se suicido tal vez no tenia motivos para hacerlo, era de familia acomodada, tenia una novia hermosa y buenos amigos que lo veían como a un líder, su vida era normal; por que lo había hecho era la interrogante del comandante Ortega que solo tenia como evidencia un vídeo y un viejo diario que al parecer no era del chico pero la sangre si lo era.

-bien Robert pásame esa cámara de vídeo, veamos que nos dejo el chico
-señor creo que el diario es mas importante
-por que lo dice Robert
-por que era de su abuelo o bueno así parece
-de su abuelo
-las fechas así lo indican
-pues dámelo a ver que cosas tiene

El comandante Ortega no podía creer lo que estaba viendo, el diario no era del abuelo, era una nota del chico eran las cosas que haría antes de morir y lo que pasaría después de muerto.

6 comentarios:

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  2. esperate esto me da mala espina como que andas mal, no seras tu ese José eso de me da asco vivir y luego esto tenemos que hablar

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  3. no pasa naa' todo bien por acá tu estate tranquilo o tranquila

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  4. mmm tambien me dio esa impresion, y recorde algo muy peculiar de ti, mira que parece que describes en este texto tus diferentes yo!!!

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  5. Wey, cuando publicas lo demas??
    esta historia se ve buena
    espero no acabe con algo...extraño.

    juan reptil

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  6. ooooorale esta interesante este relato te puedo decir que por un momento hasta escalofrio mi dio pero al igual esta muy interesante espero continue -Diana-

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