jueves, 14 de junio de 2007

Borak el segundo sueño


Por la mañana después de esa horrible noche mis padres me hicieron muchas preguntas, sobre todo mi madre, pero yo solo movía la cabeza y trataba de no recordar ese mal sueño, mi abuelita decía que yo tenia la lengua suelta y que parecía un periquito, pero ese sábado yo solo pronunciaba monosílabos y movía la cabeza, mi madre estaba preocupada pero no hizo mucho caso y todo siguió como un día cualquiera.

La noche llego y yo no quería dormir, no quería encontrarme con esa pesadilla, la hora en que mis padres me mandaron a dormir llego y la sentí el final, ¡si! mi fin, no quería ver esa cosa peluda, de verdad tenia miedo, entre al cuarto de mis padres y tome prestada la linterna, ¡ah! que mala suerte, tendría que sacrificar algo de mis ahorros para comprar unas pilas para hacerla funcionar, ya que no pensaba dormir esa noche de sábado.

¡Demonios! me grite a mismo al despertar, no se en que momento me quede dormido, pero nada paso, no soñé con el demonio azul-morado.

Decidí hacer un retrato hablado del enemigo, es mas recuerdo que al gritar pronuncio algo creo fue ¡Boraaaaaaaark! ese grito aterrador, su silueta no deja de ser graciosa, pero de veras que da miedo. Una vez terminado mi dibujo se lo enseñe a mamá y lo que dijo no me cayó en gracia, ¡que nopal tan coqueto has dibujado! no se por que lo vio como nopal, trate de explicarle pero estaba ocupada y no podía atenderme, la visita de los abuelos la tenia preocupada, además de que se había sentido mal ultima mente, y papá la trataba de forma muy extraña.


Al llegar mi padre le enseñe a mi pesadilla pero ni siquiera la miro solo que dijo ¡que bonito tu dibujo! y pregunto ¿donde esta mamá? en la cocina conteste, al parecer esto solo a mi me preocupaba.


Otra vez la noche le gano al día y mis padres me mandaron a dormir, yo fui a la cama sin rezongo, mi deseo no era descansar, mantuve los ojos pelados tanto pude pero una vez mas el sueño me venció, todo iba bien, estaba en Iraram, la tierra de los caballos, y el poderoso Yerí me mostró una cueva, en esta se encontraba un tesoro que tenia que entregarle, malo fue haber entrado, la figura del el Borark apareció de pronto, trate pero no pude escaparme, su grito me alcanzo, esta vez duro mas tiempo y no recuerdo que paso después, todo estaba oscuro y de pronto de nuevo estaba en Iraram, con todos preocupados, también escucharon ese grito, preguntaron pero de pronto desperté. Otra vez sudando y llorando, podía ver la luz del sol asomándose de nuevo, comprendí que ese monstruo era de veras poderoso, de lo que me enteraría después era que la única arma que tenia para vencerle era soñar...

1 comentario:

  1. Como ya lo habia dicho me gusta tu historia, es tan gracioso eso del nopal...!!! tu mami tiene imaginacion. Tambien no se te olvide que quiero mi autografo... jajajaja...!!!

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